Resumen |
En 1917, tres niños llamados Lucía, Francisco y Jacinta vivieron un gran milagro. Mientras pastoreaban su rebaño de ovejas en las afueras del pueblito de Fátima, en Portugal, la Santísima Virgen los visitó, no una sola vez sino muchas más, y les reveló importantes y maravillosos secretos que influirían toda la creación.
Cuando los niños intentaron compartir el mensaje de Nuestra Señora de Fátima, nadie les creyó, hasta el día en que el sol pareció bailar en el cielo. Muy pronto se hizo evidente que los pequeños pastores habían sido escogidos por la Virgen María para difundir su mensaje. |